No habrá medidas cautelares y se consuman los descensos por arrastre para la temporada 2022/23. Blanco y en botella, se suele decir, estaba muy claro aunque trataron de disfrazarlo con lo de las medidas cautelares. ‘Una milonga’. El pasado viernes se daba a conocer la noticia de que el juez que lleva en el juzgado Central de lo Contencioso Administrativo la reclamación de Proliga y de los clubes de la Tercera División española que habían solicitado la impugnación de los descensos a Categoría Regional Preferente, por arrastre de equipos de Segunda RFEF, y por tanto medidas cautelares para poder seguir compitiendo en categoría nacional hasta que se resolviese la situación, se ha inhibido del caso y pasa la pelota al Tribunal Superior de Justicia de Madrid para que sea quien decida.
Esta medida ha provocado que los equipos de Tercera División que han descendido de categoría por arrastre de los equipos de Segunda RFEF tengan que jugar en categoría Preferente la temporada 2022/23, puesto que los grupos de Tercera RFEF a nivel nacional tendrán solo 16 equipos. Los afectados canarios por arrastre ya los conocen: CD Buzanada, CD Herbania, SD Tenisca y CD Vera,, que junto con los descendidos directos UD Las Zocas, Unión Viera, y Las Palmas C, éste último por descenso de Las Palmas Alético, suman la cifra de siete descensos en las islas a categoría Preferente.